Ronaldo Menéndez narra en Las bestias (lengua de Trapo, 2006) la historia de un profesor de instituto paranoico obsesionado con que le van a matar y con su cerdo gigantesco «que devora todo lo que no sea su propio cuerpo». Como hilo argumental resulta, cuando menos, chocante, y uno acaba, tras su lectura, con una extraña sensación de haber perdido el tiempo en zonas prohibidas y bestiales del subconsciente.
No sé si recomendar su lectura. Quizá habría que decir antes: «las páginas que va a leer pueden herir muy seriamente su sensibilidad». Desde luego sí que vale para un corto cinematográfico al estilo de Tarantino.
En fin, realismo del sucio, aunque de literatura limpia y estimulante, por un joven escritor cubano, Ronaldo Menéndez, que debe ser discípulo de Pedro Juan Giménez.
Ahí van algunas perlas:
Nunca pensó que su hobby, el vicio de las líneas telefónicas imperfectas en una ciudad que se caía a pedazos, fuera a regalarle la noticia de su muerte. (p 12).
Pero antes, el cadáver, ay, siguió muriendo durante más de una hora, pues uno de los plomos había salido por el centro de la espalda rompiénsole dos vértebras, y el otro se había alojado en el ventrículo izquierdo de su corazón, haciendo de tapón que no dejaba salir la sangre hacia la caja torácica. (p 53).
Regresa con el sancocho y, al ver la bola negra metiendo su hocico desaforado en el balde, experiementa una porcinofobia irrefrenable, pero es demasiado tarde cuando intenta golpearle la frente con una de las manos: el animal ha conseguido balancear el balde y vierte parte de su contenido sobre las piernas blancas del profesor. Claudio odia la infeliz idea que lo llevó dos días antes a conseguir todas aquellas tripas de pescado con un cocinero del Instituto. (p 70).
Lo peor, para el degenerado, son las noches. Todo se oscurece dentro del baño, pero sobre todo el puerco. Imagino que poco a poco su vista deficiente y humana se va adaptando, aunque sólo lo suficiente para ganar el boceto de ciertos contornos entre los que se verifica aquella loma con brillo en los dos huecos del rostro. (p 96).
[techtags: las bestias, ronaldo menéndez, literatura, cultura]
Deja una respuesta