El pasado fin de semana se organizó en Madrid el I Congreso de innovación educativa. Nuestras compañeras de Filosofía para niños Elena Morilla, Ana García y Carmen Bengoechea estuvieron allí para explicar su labor innovadora. Es un lujo trabajar con ellas para diseñar y organizar el segundo curso online de «Filosofía para niños y TIC» que pondremos en práctica después del verano.
Este es uno de sus reveladores comentarios tras el congreso:
Este fin de semana hemos asistido al I Congreso de Innovación Educativa. Ha sido un evento agotador, como son siempre, donde hemos visto y oído cosas interesantes y otras no tan interesantes. En general la innovación educativa allí presente se dividía entre los movimientos de renovación radical y los de ligero cambio de las cosas, de ese que lleva cambiando 200 años y que aún tiene a los alumnos sentados en pupitres mirando a una pared.
He de deciros que nosotros defendimos el cambio radical basado en otra escuela, como no podía ser menos.
Hablemos de las cosas positivas. Ver a la gente que se consideraba en retirada andar por los pasillos y hablar con energía. Escuchar propuestas de trabajo muy cercanas a la nuestra y pensar en buscar la manera de cooperar. Escuchar hablar con cierta valentía de proyectos renovadores, y saber que se van a oír mas allá de las paredes del Meliá Castilla.
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